Intensamente
Acompañé a mi hijo a ver "Inside Out" y me ha mostrado varios matices. La historia de Riley, una niña feliz de 11 años, que bruscamente siente cambios emocionales, trata de cómo nuevos retos -enfrentarse a los padres a quienes ama- y sentir los distintos tonos afectivos de quien a tientas va independizándose, van de la mano con el resquebrajamiento de la infancia.
La película, que en Lima sigue en cartelera, apuesta por dos focos de atención: el mundo exterior e interior de Riley. La historia gatilla con la mudanza de la familia de Riley a un suburbio, a una casa desvencijada y a una escuela desconocida, y a la vez la historia narra la relación conflictiva entre las cinco emociones que comandan a la mente de Riley.
Se dice que "Inside Out" le muestra a un niño lo que jamás podrá explicar un PhD sobre la mente. ¿Son nuestras emociones quienes determinas cómo reaccionamos ante la realidad de un gesto amable, de un desplante o de una derrota? ¿O la realidad exterior inscribe con un yerro caliente nuestro repertorio emocional?
El acierto del filme es que las circunstancias cotidianas y la vida mental de Riley interactúan por hilos muy finos, y el espectador descubre que ambas dimensiones no marchan ni separadas ni paralelas, y uno se pregunta más bien si eso ámbitos coinciden o son dos formas de describir la misma situación.
La mente de Riley, es otro tema clave, no posee una única voluntad, sino que está poblada por Alegría, Tristeza, Desagrado, Furia y Temor. Alegría, la voluntariosa emoción, ha consignado tareas a las otras emociones, salvo a Tristeza, a quien le traza un círculo de tiza del que no debe salir.
Marginada y reprimida, Tristeza toma el control de Riley, pelea con Alegría y ambas salen del “Comando Central” y recorrerán los confines crepusculares de la mente de Riley, viendo recuerdos alegres y tristes, recuerdos vivos y extinguiéndose, recuerdos de entrañables boberías y recuerdos de pesadillas.
En ese viaje, Alegría va preguntándose qué papel tiene Tristeza en la vida de Riley, y por eso, "Inside Out", además de mostrar que las riendas de nuestras decisiones son complejas, es un película sobre el pequeño y el gran duelo de dejar de ser niño, tomar consciencia de aspectos no siempre alegres y del dolor fecundo que significa ampliar nuestra mente. Y si por ahí uno moquea con algunas escenas -el heroísmo sin límites de Bing Bong- es que es un film no sólo para niños; es un film que sólo deja impávido al despatriado, en el potente sentido que le dio Ryle a la niñez: la única patria del hombre es su infancia.
http://www.radioexitosa.pe/entretenimiento/expl64836-intensa-mente-el-duelo-de-dejar-de-ser-nino-por-hector-ponce